La rentabilidad de Tesla como negocio sigue siendo la gran asignatura pendiente del fabricante de coches eléctricos.
En el último trimestre del 2019 consiguió ser rentable, pero como viene siendo habitual, en el cómputo anual del año siguió perdiendo dinero, tantos como 862 millones de dólares, y es un consuelo porque es un 11% menos que el año anterior.
La verdad es que los números de Tesla en las últimas fechas invitaban al optimismo, sobre todo en un mercado del automóvil muy deprimido.
Los inversores que apuesten por Tesla, están apostando por que en el futuro la empresa conseguirá generar beneficios, un hecho que hasta el momento y desde su creación, no se ha producido.
Podríamos decir que Tesla “es un negocio de crecimiento” bastante curioso, ya que después de 17 años sigue sin ofrecer beneficios a sus accionistas, más allá de la revalorización de sus acciones.
A modo de comparativa, los primeros inversores y accionistas de Amazon no estaban contentos por que tardó 7 años en producir beneficios.
Interesante este análisis de Tesla. Yo creo que todo dependerá del perfil de inversor que tengas. Saludos!!
Totalmente de acuerdo.
Un abrazo.