Estrategia Dividend Growth Investing, DGI

Invertir en empresas que pagan dividendos, no es lo mismo que una estrategia Dividend Growth Investing.
En muchos círculos (blogs y foros de inversión), se habla de la estrategia de invertir en acciones que generan dividendos, esto está genial, ya que producen un flujo de efectivo que puede dedicarse a miles de cosas y parece una estrategia sencilla de seguir.
Sin embargo, en una estrategia Dividend Growth Investing, no vale cualquier empresa. Las empresas aptas para una estrategia de inversión en dividendo, con mayúsculas, debería contemplar sólo y exclusivamente, invertir en empresas con dividendos crecientes.
Hay pocas empresas españolas con dividendos crecientes, que encajen en una filosofía Dividend Growth. Quizás las acciones de Viscofan, las acciones de Enagas y alguna más.
La desventaja que tiene invertir en las acciones con mayor dividendo, sin tener en cuenta su sostenibilidad a futuro, es que la rentabilidad de nuestra cartera probablemente sea mucho más pobre que si invertimos en empresas con pago de dividendos crecientes, son acciones con mejores dividendos porque su negocio crece.

Dividend Growth

Acciones con dividendos crecientes

Estas son las leyes o pilares sobre los que construir una cartera por dividendos.
Una empresa apta para invertir por dividendos, debería cumplir una serie de condicionantes: 

  1. La importancia de la deuda

    Si queremos que las empresas en las que invirtamos, nos paguen dividendos durante mucho tiempo, y que además sean crecientes, tienen que poder hacerlo.
    Cuando compramos empresas con una deuda excesiva, estamos hipotecando nuestro futuro beneficio.
    Es práctica habitual en algunas empresas, utilizar la deuda para generar la falsa sensación de crecimiento, cuando en realidad lo único que crece es la deuda.
    ¿Cuanta deuda es razonable? Está claro que hay empresas y sectores que aguantan mucha más deuda, pero para saber si es razonable habría que comparar empresas del mismo sector.
    Además tenemos una serie de ratios, que podemos utilizar para tener una visión objetiva del nivel de deuda de la empresa analizada.

  2. Beneficios crecientes

    Es obvio, si queremos cobrar más dividendos en el futuro, los beneficios de la empresa tienen que ir en ascenso.
    No siempre vamos a tener un aumento lineal de los beneficios, todas las empresas pasan por sus baches, pero no es ninguna tontería estar pendiente de esta partida.
    Nos podemos encontrar con algunas empresas, que aumentan sus dividendos año a año, pero a costa de también aumentar el dinero del beneficio, que destinan al pago de dividendos, el payout.
    Siempre se comenta, que lo ideal es elegir empresas con payouts bajos, que lo lógico es que estén alrededor del 50% de los beneficios.
    Que el payout esté en cotas sostenibles, tiene dos lecturas, por un lado que la empresa puede pagar el dividendo en uno o varios años complicados, y segundo que queda dinero suficiente para seguir creciendo, de manera que tengamos asegurado un aumento de dividendos futuros.

  3. Track Record

    Tenemos claro que queremos empresas que repartan dividendos crecientes. No sabemos como será el futuro, por eso exigimos un nivel de deuda razonable o bajo, que los beneficios sean crecientes, y además que el payout también este contenido.
    Esto es asegurar el futuro, pero ¿Y el pasado? Pues, en el pasado tenemos que exigir un track record que nos demuestre una empresa comprometida con el accionista.
    La regla está en los 10 años. Si una empresa ha mantenido una rentabilidad por dividendo, creciente durante 10 años, es una empresa que está bien gestionada, esos negocios son los que nos interesan.

  4. No pagar demasiado por el negocio

    Esta medida es realmente controvertida. Por norma, no debemos pagar excesivamente por un negocio, por ejemplo un PER 15, que haciendo números (la cuenta de la vieja) es que amortizamos nuestra inversión en 15 años, estaría dentro de un precio razonable. (Como utilizar el PER)
    Que ocurre con esta norma, que probablemente nos podamos dejar fuera una empresa que se esté valorando a un PER 20 o más, que podría ser interesante, por ser una empresa en crecimiento.
    También tenemos empresas, que tradicionalmente se pagan a un PER alto. Para evaluar si estamos pagando mucho o poco por un negocio, lo ideal es evaluar su PER histórico.
    Me remito al PER, por que es una magnitud fácil de encontrar y evaluar por la mayoría de inversores, otros inversores prefieren utilizar el valor de la empresa, entre el Ebit. Cualquier cociente por debajo de 8 sería optimo, por encima estaríamos pagando de mas.

  5. La prueba del algodón, flujo de caja libre positivo

    Como última recomendación, hay que evaluar si lo que nos dice la empresa que gana, es cierto o no.
    Para saber que no nos están engañando, lo mejor es obtener el flujo de caja libre.
    Simplificando, que es lo que buscamos en un primer análisis, deberíamos buscar el flujo de caja operativo, y restar los gastos de capital.
    En este artículo de Rankia, queda bastante claro lo que se persigue con esta fórmula tan sencilla.

Estrategia DGI, conclusión

La estrategia Dividend Growth Investing es sencilla, casi espartana, sólo es necesario constancia y mano firme, para eliminar aquellas empresas que dejen de cumplir nuestras premisas.
Para seguir esta estrategia de inversión, obligatoriamente tenemos que adoptar una postura internacional, y mirando mucho a los EE.UU y al resto de Europa, sin tener miedo a la doble imposición fiscal, el tiempo nos dará la razón.
Tampoco es necesario que todos los valores sean Blue Chips, es más, esas acciones puede que hagan crecer sus dividendos, pero el negocio ya está demasiado maduro, una buena idea sería encontrar empresas fiables en un punto medio de crecimiento.

8 comentarios en «Estrategia Dividend Growth Investing, DGI»

  1. Se dice fácil. Comprar acciones buenas bonitas y baratas.

    Ahora sólo hace falta encontrarlas 🙂

    El problema que le veo es que es muy complicado que una empresa de esas características ideales esté en precio. Porque precisamente si cumple todo eso, estará muy demandada y por tanto cara. Tiene que ser aprovechar algún bajón gordo y rápido de la bolsa que la arrastre sin merecerlo para tener la orden puesta y que entre. Pero construir una cartera grande esperando esas oportunidades es realmente complicado, te puedes tirar toda la vida y no llegar.

    Al final te quema la liquidez y acabas entrando en empresas, que o bien no cumplen todos esos requisitos pero están a precios atractivos. O cumplen todo eso, pero las pagas caras.

    Para esta estrategia me estoy ayudando mucho de las opciones. Vendiendo puts al precio que te interesan las acciones, al menos vas sacando algo. Es un win-win. Si bajan y se ejecuta la put, tienes las acciones al precio que querias. Si no bajan y no se ejecuta la put, cobras la prima y a otra cosa. Dependiendo de la distancia al precio y el tiempo, a veces esa put te da más rentabilidad que los propios dividendos y sin tener que comprar las acciones.

    .

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    • Hola Dalamar
      Las venta de Puts está genial, yo también voy haciendo alguna que otra venta, sobre todo en acciones nacionales (mi Broker es DeGiro).
      Es cierto que es difícil ver caídas de buenos valores, pero de vez en cuando se producen. Por ejemplo, ahora están en precio algunas farmas y también Reits.
      Quizás puedan estar más baratos, pero es el momento de ir tomando alguna posición.
      Un abrazo.

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  2. Hola Miguel,

    Creo que el núcleo de nuestra cartera debe estar formado por este tipo de compañías para tener estabilidad y seguridad en los ingresos.

    Luego hay espacio para pequeñas apuestas o experimentos, empresas de mayor rendimiento y menor seguridad, pero el % de esta parte no debe ser muy grande o estaremos expuestos a recortes en nuestros ingresos cuando haya problemas en alguna.

    En España haya alguna más de que las clásicas que mencionas, pero está claro que no da para una cartera completa ni mucho menos, nos toca mirar fuera.

    Un saludo

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    • Estoy contigo.
      Tenemos que tener un núcleo duro, que nos haga resistir los embates del mercado y de la economía, una parte de nuestra cartera tiene que ser muy segura. A medida que crece, o según va creciendo y se van generando oportunidades, podemos incorporar otras empresas algo más picantes, pero siempre sabiendo el riesgo que corremos.
      Un fuerte abrazo.

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  3. Acabo de descrubir esta web que invierte de la misma manera que lo hago Yo y predico a mis amigos y familiares. También a clientes que tienen interés en invertir en bolsa de una manera tranquila.
    Gracias por el trabajo que realizais

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